A vueltas con Telma




El reciente caso de Telma Ortiz, que perdió una demanda contra una treintena de medios de comunicación, en la que pedía medidas cautelares para evitar que se entrometieran en su vida privada, es sólo la punta del iceberg, la chispa adecuada, la noticia que le ha dado al debate mayor proyección y relevancia. Existen más situaciones como la de la hermana de Doña Letizia, más graves incluso, pero la supuesta relevancia pública del personaje ha hecho que todos nos lancemos a informar, opinar y comentar sobre la misma.

Muchos periodistas sienten que el intrusismo que llegó hace poco a la vida de Telma Ortiz, está instalado desde hace demasiado en la profesión, sobre todo con la llegada de la "prensa rosa", que además, poco a poco, ha ido extendiendo sus garras hasta clavarlas en todo tipo de información; cultural, deportiva, política, económica... El periodismo de "sociedad" ha dejado de ser un tipo de información más, para prácticamente fagotizar y condicionar al resto de la actualidad.La juez que llevó el caso de la cuñada del príncipe Felipe decidió que Telma, su entorno, incluso su vida privada, sí tiene relevancia e interés público. Por supuesto, la afectada recurrirá esta interpretación de los Derechos a la intimidad y también a la información.

Pero más allá de la anécdota que esta noticia supone, se ve venir que el periodismo vuelve a necesitar, (si es que alguna vez los ha tenido en serio), nuevos debates sobre sus límites y su ejercicio. Se deberían plantear muchas preguntas y debates a raíz de casos como este; ¿hasta dónde estamos dispuestos a llegar los periodistas por seguir cobrando? ¿tiene límites la información de "sociedad"? ¿habría que imponerlos? ¿pueden seguir trabajando en medios de comunicación, o incluso dirigiéndolos, personas que no se hayan formado para este oficio? ¿deberíamos estar colegiados?(este es el tema de la primera encuesta del blog) ¿hasta dónde puede manchar todo esto la imagen de nuestra profesión?

El periodismo está en pleno huracán y le conviene decidir hacia dónde y cómo se mueve. Aprovechar los nuevos medios que van surgiendo para renovarse y debatir, y las leyes para comenzar a dejar las cosas limitadas y en su sitio, antes de que el tsunami de interpretaciones, beneficios, "shares" e intrusos vestidos de rosa le arrastre definitivamente.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Mucho daño le ha hecho la llamada prensa rosa al periodismo. Y muchas veces me he preguntado si es real el interés por saber de la vida de personajes que no conocemos más allá de la pantalla de televisión. ¿Cómo puede ser que se viva pendiente de si Kiko Pantoja, que si el guardaespaldas de Obregón, etc y cuando a nuestro vecino le aparece algún problema o necesita de nuestra ayuda seamos incapaces de escuchar o prestarle atención? no encuentro las palabras adecuadas para expresarme. En resumen es mucho más morboso la vida ajena que la cercana, y eso nos hace menos sensitivos frente a los problemas y necesidades de la vida diaria.
Los límites hace mucho que se cruzaron, Lady Di es un buen ejemplo. Es cierto que Telma no se lo ha buscado pero es inevitable siendo la hermana de quien es, y sí, se deberian poner límites y sanciones a la intrusión en la vida privada de la gente.

Marta

Álvaro M. Román dijo...

Vaya tela. Para una oportunidad que había de pararle los pies a los paparazzis sin escrúpulos...

Anónimo dijo...

No me extraña que la gente le coja manía a los medios de comunicación. Es que, como esta gente que encima osarán llamarse periodistas, pueden pasarse el día entero esperando a que una señora, que su mayor delito es ser hermana de una princesa, de un paso para asediarla. No estoy segura de si la culpa es de los periodistas que la siguen o del público que lo acepta.

Anónimo dijo...

Buff, prensa rosa, y limites, este es el debate que en las mayoría de universidades de periodismo se da, pero claro, como podemos saber donde estan nuestros limites, si no tenemos unas reglas del juego que nos enseñen donde acaba la información y donde la vida privada. Además, como estudiante de periodismo tenemos profesores que nos enseñan los derechos, pero no para respetarlos, para saber como saltarlos, y como degradar un poquito más la etica periodistica, si es que existe de verdad.

Agregar nada más que los cursos que más asistencia cuentan de la universidad son los de prensa rosa, ya que desde el principio te venden que por no hacer nada cobras una pasta, además de estar en boca de todo el mundo "¿Y tu que estudias periodismo?, claro para ser la proxima carmele marxante..."

Señores, el periodismo necesita algo más serio que esto

Anónimo dijo...

Es increíble como la prensa rosa a ido prácticamente monopolizando los medios de comunicación, y como se le permite ejercer a esos pseudo periodistas que no han recibido ninguna formación y que son incapaces de decir dos frases seguidas sin levantar la voz. En mi opinión los medios de comunicación tienen un gran poder sobre la sociedad, y me da pánico ver como hay una serie de personajillos que se dicen periodistas que no tienen ni idea ,y lo peor no hay un colegio profesional ni una normativa que regule eso.

Anónimo dijo...

Hola chicas!!! Antes de empezar os diré que me encanta vuestro Blog, sobre todo por que así puedo opinar sobre el tema de Telma Picapiedra, que, personalmente, me asombra y fascina a partes iguales. Pregunta: ¿alguien es capaz de decir tres momentos en los que haya podido ver a la susodicha "acosada" en revistas del corazón? Ni vosotras ni nadie. Lo que de verdad le pasa es que está celosa de toda la atención que recibe la Obregón y ha decidido plantarse con un cartel de neón a cuestas que diga ¡TOY AQUÍ! ¿Os la imaginais en verde y con el cartelito? Pos lo mismo. Lo único que de verdad me preocupa del tema es que cuando pierda el recurso, por que lo va a perder estrepitosamente, ¿quien va a pagar las costas? Si su hermana vive en un palacete que hemos pagado y al que no tenemos acceso, si la boda la pagamos todos, aunque no recibinmos reuerdo o tarjetón, ¿quién pagará todos esos millones? Así cualquiera denuncia. Que poca verguenza que miles d epersonas no puedan hacer uso de la justicia por problemas financieros y que esta cara dura tenga una sentencia en cuatro días (lo normal son semanas, cuando llega...) Ale, que me alegro de que la condene, y ojala le quiten hasta la camisa, por favor, que estamos hablando d eun a persona que "trabaja" de voluntaria, pero: cobra un sueldo, que evidentemente no le da para pagar el tren de vida que lleva y es la única voluntaria que va por el mundo con un equipo médico completo que la sigue a todas partes... Pues lo dicho chicas, que de esto habría que organizar un debate serio, por que hay mucho que decir.
Besos. María.

Anónimo dijo...

Ahí, ahí, anónima Badenes, dando caña te queríamos ver.
A mi no me preocupa que sea Telma Ortiz o no, que obviamente es una injusticia que la justicia (sí, mala redundancia) vaya más rápida para ella por ser quién es. Aunque con Ana Obregón y los "miami"parece que también va a ir rapidito el asunto...
A mi lo que me preocupa es:

- ¿Por qué la juez decide que su vida privada es de interés público? ¿qué nos interesa de ella?
Porque desde luego, los periodistas qe le siguen...no lo hacen por desvearnos cómo sufraga su tren de vida.